Valdivia "Ciudad Humedal" y la Conferencia de Ramsar: el multilateralismo como herramienta para el desarrollo sostenible de los territorios
Por Paulina Stowhas, División de Medio Ambiente, Cambio Climático y Océanos
El multilateralismo, a través de los tratados internacionales en medio ambiente, ofrece una plataforma para tomar decisiones colectivas y abordar problemas globales complejos que requieren la cooperación de los diferentes Estados para ser resueltos.
En la actualidad nos encontramos frente a tres crisis ambientales globales interconectadas: el cambio climático, la contaminación y la extinción de especies. Para abordarlos, Chile es signatario de varios convenios, entre esos la Convención de Diversidad Biológica (CDB) y la Convención para los Humedales.
La convención para los humedales, o también llamada Convención Ramsar, promueve la conservación y el uso sostenible de los humedales en todo el mundo, y hoy en Chile tenemos una agenda muy activa al respecto.
Entre sus principales herramientas, la Convención ha implantado un sistema de acreditación de “Ciudad de Humedal”, siendo Valdivia una de las primeras ciudades en Latinoamérica en obtener este reconocimiento, junto a Trelew en la Patagonia Argentina, el 23 de enero pasado.
Este reconocimiento fue logrado gracias al gran sentido de responsabilidad social de la propia ciudadanía en Valdivia y al trabajo continuo por parte las autoridades de la región y el gobierno, tanto a nivel subnacional como a nivel central, donde tuvieron un rol preponderante la Corporación Nacional Forestal (CONAF), el Ministerio del Medio Ambiente (MMA) y el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Sin embargo, este no ha sido un camino fácil. También la ciudad de Valdivia se vio afectada por una catástrofe ambiental a principios de este siglo, debido a la contaminación del Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter.
Frente a esto, Chile solicitó su ingreso a la Lista de Montreux, otra herramienta de la Convención, que permite identificar sitios que están amenazados y a los que se debe prestar una atención prioritaria a nivel nacional e internacional con miras a su conservación y con el compromiso de corregir y generar cambios para su recuperación.
Dos décadas después de ese episodio de contaminación y gracias al trabajo de la comunidad y los servicios públicos, estamos mirando al futuro con optimismo. Además de recibir este gran reconocimiento, esperamos prontamente sacar de este listado al santuario debido a su gran recuperación y al trabajo realizado por parte de diversos actores. Para ello, la Cancillería, con el apoyo de los puntos focales del convenio Ramsar (CONAF y MMA), la Municipalidad de Valdivia y el Consejo Consultivo del Sitio Ramsar, han solicitado a la Secretaría de esta Convención una misión de expertos para que elaboren un estudio independiente sobre posibles medidas para desarrollar en el Humedal Río Cruces.
Valdivia es una ciudad conocida por su constante preocupación y acción sobre el medio ambiente. No es casualidad que hoy Valdivia sea vista por el mundo como una ciudad que avanza hacia la protección de sus ecosistemas de una manera participativa y consensuada.
El escenario institucional en materia ambiental y de humedales en el país ha mejorado sustancialmente en los últimos años. Chile ha fortalecido su marco institucional con la Ley 21.600 que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) y la Ley 21.202 sobre declaración y gestión de humedales urbanos. Bajo el SBAP, se deberán homologar los sitios Ramsar, como el Santuario de la Naturaleza Carlos Andwanter como área protegida. Asimismo, la reciente Norma Secundaria de Calidad de Agua en Valdivia, será clave para traducir los acuerdos internacionales en acciones concretas a nivel local.
Estamos seguros de que la acreditación de Valdivia como “Ciudad Humedal” será un aporte para seguir promoviendo la conservación y el uso racional de los humedales. El reconocimiento también puede contribuir al desarrollo sostenible de la ciudad y de la región, y refuerza nuestra política exterior ambiental, centrada en fortalecer el multilateralismo como herramienta para contribuir al bienestar de las personas y del medio ambiente.